miércoles, 11 de agosto de 2010

NUESTROS MARES

GORGONA
Gorgona es una isla colombiana en el Océano Pacífico, situada a cerca de 50 kilómetros de la costa pacífica de este país, y tiene un tamaño aproximado de 9 kilómetros de largo y 2.5 de ancho; y con una altura máxima de 338 metros sobre el nivel del mar. Allí las únicas personas que habitan son los que manejan en centro de Ecoturismo del lugar.
Desde 1952 hasta 1982 este isla fue utilizada por Colombia como prisión en donde encerraban a los delincuentes más peligrosos, quienes al intentar escapar podían ser mordidos por serpientes venenosas o ser atacados por los tiburones que habitan alrededor de Gorgona.
Gorgona fue establecido como Parque Natural Nacional en 1984 y allí llegan turistas a contemplar las decenas de especies animales que allí habitan, entre las que se encuentra la especie autóctona el Lagarto Azul de Gorgona. Sin embargo, uno de sus mayores atractivos se encuentra entre los meses de Agosto y Octubre, cuando las ballenas jorobadas llegan allí junto a sus crías.
En esta isla colombiana se ha establecido un centro de ecoturismo que ofrece hospedaje y alimentación, en un asentamiento llamado El Poblado, que es tranquilo y junto al océano. A cada grupo que llegue a la isla se le asigna un guía que los acompañará y llevará por el lugar. Se recomienda llevar botas largas de caucho, camisetas de manga larga y repelente de mosquitos.


Tuluá es uno de los municipios más importantes del sur occidente colombiano, se localiza en el corazón del departamento del Valle del Cauca a 97 kilómetros de la ciudad de Cali, capital departamental.
Fue fundado en el año de 1639 y actualmente cuenta con una población cercana a los 200000 habitantes, quienes en su mayoría se dedican a el comercio, la agricultura y la ganadería.
Es una ciudad que ofrece gran variedad de alternativas y variedades para que la estancia de sus visitantes sea de agrado total, posee numerosos hoteles y pensiones, centros comerciales, coliseos deportivos, bancos, centros de convenciones y auditorios, entre otras atracciones.
Tuluá se encuentra rodeado por bellos paisajes naturales, que lo convierten en un importante centro turístico de la región. Es conocida como “la ciudad verde”, y no es para menos, ya que cuenta con hermosos lugares como Jardin Botanico Juan Maria Céspedes, localizado a tan solo 7 kilómetros del casco urbano en el corregimiento de Mateguadua y se caracteriza por albergar grandes extensiones de Bosque Seco Tropical. A 20 minutos de allí se encuentra La Arenosa, una cascada sobre la que se puede realizar rappel y rafting por el río Tuluá.
Desde Tuluá se puede llegar al Parque Nacional Natural Las Hermosas y sus extensos bosques de niebla.


Sobre las costas del Océano Pacifico colombiano, en el departamento de Nariño, se encuentra uno de los parques naturales más bellos del país, el Parque Nacional Sanquianga.
Fue creado en el año de 1977, y posee un área de 80 mil hectáreas, de las cuales el 30% lo componen manglares, hogar de una gran diversidad de especies de aves, peces, crustáceos y moluscos, que cumplen además una tarea fundamental en la economía de la región.
Cuenta con más de 60 kilómetros de playas, utilizados en su mayoría por las tortugas Caguama para anidar. Esta tortuga se encuentra en peligro de extinción, por lo que uno de los objetivos del parque es brindarle todas las garantías necesarias para su protección y repoblación.
En otras zonas del parque podemos encontrar especies como osos perezosos, iguanas, babillas, aves, tigrillo, el tatabro y varias especies de roedores. El avistamiento de aves es una de sus principales atracciones, ya que se registran 60 especies de las cuales 14 son migratorias.
Además de la población propia de la región, los cuales en su mayoría son afro descendientes dedicados a la pesca, el parque lo habitan personas que adelantan procesos de trabajo para la concertación de proyectos de conservación y educación ambiental con el fin de mejorar la calidad de vida y fortalecer la convivencia dentro de éste territorio.



-El territorio colombiano abarca una extensión de espacios marítimos ricos en recursos biológicos y minerales, que constituyen un enorme potencial para la integración económica y el desarrollo del país.
Colombia ejerce soberanía sobre el mar Caribe en un área de 540.876 km2 y una costa que se extiende a lo largo de 1.600 km. Su geografía de relieves complejos, poco conocidos, comprende playas de fondos arenosos y rocosos, praderas de pastos marinos, arrecifes coralinos y manglares.
A lo largo del mar Caribe, en el límite con el continente, se desarrollan los ecosistemas de playas y fondos arenosos, muchas veces ocupados por praderas de hierbas marinas, interrumpidas por sectores rocosos y manglares. Son áreas de ecosistemas frágiles, donde habitan grandes comunidades de plantas y animales tolerantes a la salinidad.
El valor de las playas de arena lo da el ser humano. Su atractivo turístico, como áreas de recreación y descanso, convierten a este ecosistema en un renglón estratégico para la economía.
Las playas del Cabo de la Vela, Parque Tayrona, Cañaverales y Arrecifes, las coralinas de San Andrés y Providencia, las extensas playas del Viento, en Córdoba, las de Santa Marta y Cartagena, son ejemplos de playas arenosas donde se desarrollan ecosistemas frágiles.
Los fondos rocosos del mar Caribe están ocupados por formaciones coralinas, en las cuales conviven langostas, caracoles, algas y peces pargos, meros y chernas, entre otras especies. Estos ecosistemas están sometidos a fuertes presiones como la contaminación, la sobreexplotación de peces y la destrucción de comunidades vegetales.
En la actualidad, los manglares y espacios coralinos desarrollados sobre la franja costera sufren una constante intervención que ha reducido su extensión. Los manglares se adaptan a aguas salobres y suelos fangosos, en un medio con déficit de oxígeno donde, además, confluyen animales y plantas de origen marino y terrestre.



-El espacio geográfico que ocupan los litorales y costas de Colombia, funciona como un gran sistema donde se desarrolla un sinfín de paisajes que difícilmente pueden generalizarse.